Tras varios días sin aparecer en público, mañana Lunes podremos ver y escuchar al presidente de España.
by María García
Menos de un mes en el poder, ha sido tiempo suficiente para conocer cual será la política que aplicará el partido gobernante en España. Con mayoría absoluta no le será necesario buscar aliados para la tan mentada reforma del Estado, que no es otra cosa que la privatización de todo lo privatizable y el "control del gasto público",que no es gasto pero que por ser éstas, ordenes emanadas del FMI y el BM, han de continuar aplicándose de manera acelerada. Si existía la posibilidad de demorar la reforma laboral hasta el triunfo de las elecciones en Andalucía, hoy eso es imposible porque las Agencias o Mercados o de quien se trate en esta oportunidad, no le permiten al ejecutivo español más dilaciones en el asunto, por lo que habrá que entrar en acción ya. No habrá respiro esta semana, luego de que tuviera que aumentar la carga impositiva hay que continuar con los ajustes. Tal vez dentro de 90 días tenga que anunciar medidas más duras, pero esa será otra historia, por lo pronto lo seguro es lo que tenemos hasta ahora, que una cosa es gobernar y otra muy distinta estar en la oposición. Los mandatarios no han mentido a sus mandantes, continúan siendo obedientes y defendiendo los intereses de la clase dominante, para eso están donde están. El engaño al pueblo tampoco ha sido tal, al fin y al cabo esta bien definido quienes votan al partido gobernante y quienes no. Lo que llama la atención y ha de hacernos reflexionar es la pasividad de las clases más desprotegidas, la no toma de la calle en defensa de lo público, no desde lo ideológico ni de lo político, simplemente por la defensa del propio interés, es decir por defender lo que ya ha pagado y que desde mañana tendrá que volver a pagar, y más caro.