Hoy volvimos a ir a la zona de Sol e
n donde un grupo de personas, autodenominado 15 M, permanece acampando en el lugar en protesta, entre otras cosas, por el bipartidismo. Hoy vimos más gente que ayer, también había más policía con uniforme y muchos policías de civil.
Las criticas van dirigidas contra los Bancos –poder económico actual- y contra el sistema político, una “democracia minusválida”, y una clase dirigente cada día más comprometida con los sectores de poder y de espaldas al pueblo. Es indudable que quienes acuden a la convocatoria tiene muy en claro que “el Estado defiende los intereses de la clase dominante”. Según los medios periodísticos, la organización de la protesta partió de Internet, cosa que dudo. Se me ocurre mucho más lógico, que tras varias reuniones y propuestas se decidiese por organizar un acto y a partir de ahí, sí, la utilización de la red para obtener mayor apoyo.
Muchos se preguntan hasta cuándo durará la acampada en Sol, y en otros lugares de España; creo que hasta el Lunes 23 de Mayo estarán en la etapa de preparación y que a partir de esa fecha, sí podríamos hablar de un acto de enfrentamiento contra el sistema, pero habrá que ver si este movimiento dispone de suficiente fuerza como para enfrentarse a los partidos políticos tradicionales que el 22 de Mayo presentan candidatos en las elecciones.
Esto no es el mayo francés, ni la plaza de Tianmen, ni el movimiento asambleario argentino del 2001, aquí la cuestión parte de un hartazgo de la ineficaz y mediocre clase política y empresaria que va llevando al país a un callejón sin salida.
n donde un grupo de personas, autodenominado 15 M, permanece acampando en el lugar en protesta, entre otras cosas, por el bipartidismo. Hoy vimos más gente que ayer, también había más policía con uniforme y muchos policías de civil.Las criticas van dirigidas contra los Bancos –poder económico actual- y contra el sistema político, una “democracia minusválida”, y una clase dirigente cada día más comprometida con los sectores de poder y de espaldas al pueblo. Es indudable que quienes acuden a la convocatoria tiene muy en claro que “el Estado defiende los intereses de la clase dominante”. Según los medios periodísticos, la organización de la protesta partió de Internet, cosa que dudo. Se me ocurre mucho más lógico, que tras varias reuniones y propuestas se decidiese por organizar un acto y a partir de ahí, sí, la utilización de la red para obtener mayor apoyo.
Muchos se preguntan hasta cuándo durará la acampada en Sol, y en otros lugares de España; creo que hasta el Lunes 23 de Mayo estarán en la etapa de preparación y que a partir de esa fecha, sí podríamos hablar de un acto de enfrentamiento contra el sistema, pero habrá que ver si este movimiento dispone de suficiente fuerza como para enfrentarse a los partidos políticos tradicionales que el 22 de Mayo presentan candidatos en las elecciones.
Esto no es el mayo francés, ni la plaza de Tianmen, ni el movimiento asambleario argentino del 2001, aquí la cuestión parte de un hartazgo de la ineficaz y mediocre clase política y empresaria que va llevando al país a un callejón sin salida.
